Es un material fácil de usar, de buena adherencia, que forma una capa dura, resistente y elástica. Una vez que está seca es fácil de lijar, proporcionando un acabado muy fino, sin porosidades ni grietas, ideal para recibir la pintura y dar una perfecta terminación a la pared. No necesita aplicarse en varias capas, tampoco aditivos ni diluyentes químicos.

Existe un tipo de pasta muro para uso interior y otro para uso exterior. La pasta muro para uso exterior es más firme y resistente a la humedad, por lo que también es recomendada para usarla en baños y cocinas.

La pasta muro puede encontrarse generalmente en bolsas de 1 kilo, tinetas o galones.

El acabado de la pasta muro puede ser opaco o mate, y su terminación es lisa.

Si es un muro con pintura antigua, hay que pasar una espátula o cepillo para eliminar cualquier rastro de pintura suelta o descascarada. Luego pasar un escobillón y paño seco para eliminar el polvo.

Con la punta de la espátula golpear la fisura para asegurarse que no quede material desprendido. Aplicar en capas delgadas, dejando secar entre cada una, sacar el exceso con la espátula.

Para aplicar en un muro, se debe poner el material en la llana lisa y aplicar de abajo hacia arriba, sacando el exceso.

Dejar secar durante 24 horas y lijar el muro para tener una superficie totalmente lisa.